El Malilla, uno de los máximos exponentes del reggaetón mexicano, marcó un antes y un después al convertirse en el primer artista urbano nacional en encabezar el escenario principal de Coachella 2025, el festival de música más influyente del mundo. Pero su paso por el festival no solo fue musical: su presencia también resonó como un manifiesto de estilo, identidad y cultura.
El Malilla y su look histórico: moda, arte urbano y orgullo mexicano
Para este momento icónico, El Malilla eligió un atuendo diseñado por la firma mexicana Ayanegui en colaboración con Levi’s, la legendaria marca estadounidense de denim.
El resultado fue una pieza de moda sostenible y profundamente simbólica que fusiona diseño experimental, reciclaje textil y una poderosa narrativa de orgullo nacional.
La propuesta fue elaborada a partir de denim reciclado, rescatado del archivo de Levi’s. Cada prenda fue intervenida a mano por Ayanegui como si se tratara de una obra de arte textil. Esta colaboración entre moda circular y visión artística marcó un punto de inflexión dentro del universo del fashion latinoamericano contemporáneo.
Detalles del look: una narrativa visual de México para el mundo
La prenda superior fue una chamarra tipo motociclista en denim verde deslavado, intervenida con aerosol en tonos tierra para crear una textura cruda que remite tanto a la estética urbana como a las raíces del diseñador Giuseppe Ayanegui. En la espalda, brillaba la leyenda “CDMXXX, México”, escrita con cristales, como una afirmación rotunda de identidad.
En la parte inferior, Ayanegui deconstruyó varios jeans Levi’s 501, uno de los modelos más icónicos de la moda global, para crear una silueta vanguardista, diseñada para romper moldes y destacar en el escenario de Coachella. El resultado: un outfit que dialoga entre pasado y futuro, entre tradición e innovación.
Una colaboración con mensaje: moda como acto de resistencia
Giuseppe Ayanegui, director creativo de la marca, explicó que el objetivo era crear una pieza que hablara de resistencia, reconstrucción y orgullo. “Esta colaboración es muy significativa. El Malilla representa una nueva generación de talento mexicano, y su presencia en Coachella tenía que llevar un mensaje de fuerza. Por eso trabajamos con prendas recicladas: hay belleza en reconstruir”, comentó.
El diseñador también destacó el simbolismo detrás del uso de Levi’s: “Es la marca americana por excelencia, parte de tantos movimientos de contracultura. Al intervenir sus prendas con una visión mexicana, tendimos un puente entre nuestras historias compartidas”, señaló.
