Después de más de un siglo de historia, el icónico tren real británico dejará de circular. El rey Carlos III ha decidido poner fin a su uso como parte de una estrategia para reducir gastos y modernizar la imagen de la corona. Esta decisión marca un cambio significativo en la logística de la familia real, que ahora optará por medios de transporte más prácticos y económicos, como helicópteros. El anuncio fue incluido en el más reciente informe financiero de la monarquía, y ha sido interpretado como un gesto simbólico de adaptación a los tiempos actuales, en los que la austeridad y la eficiencia son cada vez más valoradas por la opinión pública.
¿Por qué el rey Carlos III decidió eliminar el tren real?
La medida responde a un plan de ajuste presupuestario y modernización impulsado por el propio monarca. Según explicó James Chalmers, tesorero de la casa real, esta decisión refleja un compromiso con la “disciplina fiscal” y una gestión más eficiente de los recursos públicos. El tren, que ha sido parte de la vida de la realeza desde la era victoriana, será retirado debido a los altos costos de mantenimiento.
En su lugar, se autorizará el uso de dos helicópteros para cubrir los traslados oficiales de la familia real, una alternativa más flexible y menos costosa.
¿Cuándo dejará de funcionar el tren real?
El proceso de desmantelamiento del tren, compuesto por nueve vagones, comenzará en 2026. Aunque no se ha especificado una fecha exacta para su retiro definitivo, el anuncio marca el inicio de una nueva etapa en la logística de la monarquía británica.
¿Cuál es el impacto económico de esta decisión?
Durante el último año fiscal, la subvención soberana se mantuvo en 86,3 millones de libras esterlinas (aproximadamente 118,5 millones de dólares). Sin embargo, se prevé que esta cifra aumente a 132 millones de libras (unos 181 millones de dólares) en el próximo ejercicio.
La eliminación del tren real busca compensar parte de ese incremento, mostrando una voluntad de racionalizar el uso de los fondos públicos.
¿Qué significado tiene esta decisión para la monarquía?
Más allá del aspecto económico, la despedida del tren real tiene un fuerte valor simbólico. Carlos III, quien retomó sus funciones oficiales tras un diagnóstico de cáncer, ofreció una “emotiva despedida” al tren, especialmente a un vagón diseñado para él en los años 80.
“El tren real ha sido parte de la historia nacional durante décadas, cuidado con esmero por quienes lo operaban”, expresó Chalmers. “Pero así como la casa real ha evolucionado para adaptarse al presente, también es momento de cerrar este capítulo con visión de futuro”.
