La llamada “Súper Gripe” H3N2, identificada dentro del subclado K, está generando alarma internacional luego de provocar el cierre temporal de escuelas en Reino Unido debido al rápido aumento de contagios entre menores. Las autoridades sanitarias británicas han advertido que esta variante ha comenzado a comportarse como una nueva oleada epidémica, lo que llevó al director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud (NHS), Daniel Elkeles, a recomendar el regreso del uso de mascarillas en espacios públicos, incluso ante síntomas respiratorios leves.
El fenómeno no se limita al territorio británico. Países como Japón, Estados Unidos, España y Canadá también han reportado un incremento acelerado de casos. En varios de ellos, la H3N2 se ha convertido en la cepa predominante y ha impulsado un notable aumento de hospitalizaciones, afectando principalmente a adultos mayores, niños y personas con enfermedades preexistentes.
A continuación te explicamos qué es esta variante, por qué está causando tantos contagios y cómo prevenirla.
¿Qué es la gripe H3N2 y por qué preocupa a las autoridades?
El H3N2 es una variante del virus de la influenza A, uno de los principales responsables de los brotes de gripe estacional alrededor del mundo. Su nombre se debe a las proteínas presentes en su superficie: la Hemaglutinina 3 (H3) y la Neuraminidasa 2 (N2), que permiten al virus adherirse a las células humanas e infectarlas rápidamente.
Esta cepa no es nueva, pero sí presenta características que potencian su transmisión. Fue identificada por primera vez en cerdos de Estados Unidos en 2010 e incluye el gen M, también presente en la variante pandémica H1N1, lo que le otorga una mayor capacidad de contagio entre personas. Debido a esto, la variante se ha propagado con velocidad en comunidades escolares y familiares.
La inclusión del subclado K ha despertado especial preocupación, pues este grupo presenta mutaciones asociadas a una mayor facilidad para infectar y generar síntomas más intensos, lo que explica los brotes recientes en centros escolares.
¿Cuáles son los síntomas de la variante H3N2?
La enfermedad suele comenzar de forma repentina y, en muchas ocasiones, puede confundirse con infecciones respiratorias comunes. Entre los síntomas más frecuentes reportados por esta nueva oleada destacan:
- Fiebre superior a 39 °C
- Dolor intenso en las articulaciones
- Tos intensa y persistente
- Pérdida del apetito
- Dolor de cabeza
- Congestión nasal y estornudos
- Sensación general de agotamiento
- Dolores musculares
Aunque en la mayoría de los casos los síntomas son manejables desde casa, la variante está generando un aumento de hospitalizaciones, sobre todo en niños pequeños y adultos mayores.
¿Por qué la H3N2 está cerrando escuelas en Reino Unido?
El Reino Unido ha registrado un incremento inusual en la tasa de contagios entre menores de edad. En varias regiones, las escuelas han reportado ausencias masivas de estudiantes y personal docente, lo que ha obligado a suspender actividades temporalmente para cortar cadenas de transmisión.
Los expertos señalan tres factores principales:
- Alta transmisibilidad en espacios cerrados, especialmente en invierno.
- Menor inmunidad en grupos jóvenes, debido a que varias temporadas de gripe fueron leves o irregulares durante la pandemia.
- Sintomatología intensa, que hace que los estudiantes enfermen de forma más evidente y se ausenten más días.
¿Cómo se contagia la variante H3N2?
Al igual que otros virus respiratorios, la H3N2 se transmite principalmente a través de:
- Gotas respiratorias al toser o estornudar
- Superficies contaminadas
- Permanencia prolongada en espacios cerrados sin ventilación
Estas características explican su rápida propagación en escuelas, oficinas y transporte público.
¿Cómo prevenir la gripe H3N2 y reducir su transmisión?
Aunque el avance de la variante H3N2 es motivo de preocupación, existen medidas eficaces para protegerse:
- Vacunación anual contra la influenza, especialmente para adultos mayores, niños, embarazadas y personas con enfermedades crónicas.
- Uso de mascarilla en lugares concurridos o si se presentan síntomas respiratorios.
- Lavado de manos frecuente con agua y jabón por al menos 20 segundos.
- Ventilación de espacios cerrados, abriendo puertas y ventanas para renovar el aire.
- Evitar el contacto cercano con personas enfermas.
- Reposo en casa cuando se presentan síntomas para evitar más contagios.
- Hábitos saludables como buena hidratación, sueño adecuado y alimentación balanceada para fortalecer el sistema inmune.
