La “diva de la banda” tuvo una vida llena de drama, romances y sobre todo mucha música con la cual inspiró sobre todo, al público femenino.
Por: Paola Sánchez
La cantante, compositora y empresaria nació el 2 de julio de 1969, en Long Beach, California, Estados Unidos. Fue hija de Rosa Amelia Saavedra y Pedro Rivera. Se convirtió en la líder femenina más popular dentro del género regional mexicano, y vendió más de 25 millones de discos en vida y 10 millones más después de su muerte. Miles de personas la idolatraban y fue así como Jenni Rivera se fue ganando el cariño y admiración entre el público hispano. Su vida estuvo llena de altos y bajos y, no todo fue sencillo.
Mamá a los 16
En 1985, Jenni Rivera quedó embarazada por primera vez de su novio José Trinidad Marín Quinteros, a la edad de 16 años. Tuvo a su hija Janney Marin Rivera “La Chiquis” como es conocida, luego dos hijos más, Jaqueline y Trinidad. La también actriz, se separó de su pareja en 1992, luego de que este abusara sexualmente de su hija y de Rosi Rivera, hermana de la cantante.
Antes de la fama
Jenni Rivera, estudió Administración de Empresas y trabajó como vendedora de bienes raíces. Con sus ganancias compró su primera casa, muy cerca de la de sus padres y se dedicó completamente a ser madre soltera.
Amor por la música
En 1991, “La diva de la banda” comenzó a trabajar en Cintas Acuario, discografía de su padre y como siempre tuvo una gran inquietud por la música, en 1992, junto a sus hermanos Pedro, Juan y Gustavo, formaron la agrupación La güera Rivera con Banda y publicaron su primer disco homónimo. En 1994, lanzaron el álbum Viajeros del Norte, pero ninguno de estos tuvo difusión.
En 1995, grabó La Chacalosa, un tercer disco que comenzó a llamar la atención del público en Los Ángeles y sus alrededores, debido a que contenía corridos y narcocorridos. Los temas que adquirieron más popularidad fueron La Chacalosa, Mi Gusto Es y También Las Mujeres Pueden, que eran constantemente solicitadas en las estaciones de radio local.
En este lapso conoció a Juan López, con quien inició un noviazgo que terminó en compromiso. Juan estuvo en prisión seis meses al ser acusado de pasar inmigrantes de México a Estados Unidos de manera ilegal. En 1997, del fruto de esta relación nació su hija Jenicka. Jenni volvió a darse una oportunidad y, en 2001, tuvo otro hijo con él. El romance no prosperó y se separaron en 2003.
Cantante profesional
Luego de los sucesos acontecidos con su primera y segunda pareja, Jenni Rivera se mantuvo un tiempo ocupado con sus hijos en terapia psicológica y nuevamente trabajó en la venta de inmuebles. En 1991, retomó su carrera artística a nivel profesional. Grabó y editó su álbum de estudio Si Quieres Verme Llorar, acompañada de mariachis. Y, fue hasta marzo de ese mismo año cuando la compañía Sony Music le ofreció un contrato de exclusividad y el 25 de mayo se comercializó el disco. En junio, regresó al estudio de grabación de su familia, los géneros principales de su segundo disco fueron el conjunto norteño y los corridos. Finalmente el álbum Reina de reinas se publicó el 3 de agosto y tuvo gran éxito.
El mayor de los éxitos
En 2004, presentó en Los Ángeles el disco Simplemente…La mejor, que incluye los éxitos más importantes de la cantante como: Querida socia, Se las voy a dar a otro, Se marchó, Mi vida loca, entre otros. En noviembre de ese mismo año, viajó por primera vez a la Ciudad de México y promocionarse ante un nuevo público.
En 2005, lanzó su álbum de estudio Parrandera, rebelde y atrevida y, durante los siguientes meses, el disco logró mantenerse varias semanas consecutivas en el Top Latin Álbum y fue certificado como disco de oro en Estados Unidos. Su segundo sencillo De contrabando, escrito por Joan Sebastian, dominó las lista de las canciones más escuchadas en la radio y se convirtió en la única canción de su carrera en ocupar el puesto número 1 del Latin Regional Mexican Airplay de Billboard hasta la actualidad.
Con el lanzamiento de La gran señora, en 2009, Jenni Rivera se encontraba en su máximo apogeo, pues fue su regreso a la música ranchera y colaboró con Paulina Rubio, en una nueva versión del tema Ni rosas ni juguetes, en banda. También grabó junto a La Original Banda El Limón De Salvador Lizárraga a dueto el tema El destino.
Jenni gozaba de fama, fortuna y conciertos a tope. Realizó su tour La gran señora, que recorrió los escenarios más importantes de Estados Unidos, como el Escapade en Houston, el Freeman Coliseum en San Antonio, el Nokia Theatre de Los Ángeles, Allstate Arena de Chicago y el Madison Square Garden de Nueva York. También escenarios mexicanos como el Auditorio Telmex de Guadalajara, la Arena Monterrey, el Auditorio Nacional, entre otros.
El romance con Esteban Loaiza
La cantante conoció al ex beisbolista, Esteban Loaiza, en 2008, con quien pronto inició un romance que terminó en boda el 8 de septiembre de 2010. La pareja celebró el enlace en Simi Valley. El matrimonio llegó a su fin en 2012. A través de un comunicado de prensa, Jenni expresó los motivos de su separación. Tiempo después se especuló que la relación había terminado debido a que Esteban le fue infiel con su propia hija, “La chiquis”.
Ante estos rumores, Jenni continuó con su vida, y un nuevo proyecto llegaría a su camino. Fue coach dentro del programa La Voz…México, donde ganó aún más simpatía y admiración por sus fans.
Un lamentable suceso
La madrugada del nueve de diciembre de 2012, Jenni abordó un jet, junto con otras seis personas. Todos viajaban de Monterrey a la Ciudad de México, y minutos después del despegue la aeronave perdió el control y se estrelló.
Ese mismo día se confirmó que el jet había sido encontrado en un rancho de Nuevo León y que no hubo sobrevivientes. A ocho años de su muerte, miles de personas aún lamentan la partida de “La diva de la banda”.
