El certamen de belleza más importante del mundo volvió a sorprender con propuestas creativas y arriesgadas en la pasarela de trajes típicos. En esta ocasión, la representante de Noruega, Leonora Lysglimt-Rodland, se robó las miradas al desfilar con un atuendo que homenajea al producto insignia de su país: el salmón.
La joven modelo de 19 años presentó un diseño que, más allá de lo llamativo, buscó transmitir un mensaje cultural y social. Su propuesta no solo resaltó la importancia del salmón como recurso económico y símbolo de tradición pesquera en Noruega, sino que también se alineó con su activismo en favor de la sostenibilidad y la moda consciente.
¿Cómo era el traje típico de Miss Noruega?
El vestuario consistía en un abrigo que imitaba la forma y el color de un salmón. Al abrirse, dejaba ver un tono naranja intenso, característico de este pescado. Debajo, Leonora portaba un enterizo transparente adornado con flequillos que simulaban las espinas del animal. Para completar el concepto, lució un sombrero en forma de cabeza de salmón y unas botas diseñadas para parecer la cola.
¿Qué significado tenía el traje del salmón?
Aunque algunos espectadores lo interpretaron como un disfraz, el diseño tenía un trasfondo cultural. El salmón es uno de los pilares económicos de Noruega y representa una tradición que ha acompañado a las comunidades pesqueras por generaciones. Según el equipo de Leonora, la intención era “contar una historia, no solo lucir espectacular”.
¿Quién es Leonora Lysglimt-Rodland?
Con apenas 19 años, Leonora se ha convertido en una de las participantes más comentadas de Miss Universe 2025. Su disciplina, compromiso social y visión de la moda como herramienta de cambio la han posicionado como una candidata con propósito. Además de su carrera como modelo, es activista en temas de sostenibilidad y defensora de la moda consciente.
¿Qué mensaje deja Miss Noruega con su propuesta?
El traje del salmón no fue solo un despliegue de creatividad, sino también una declaración de identidad y responsabilidad social. Leonora buscó demostrar que la moda puede ser un vehículo para preservar tradiciones, impulsar la sostenibilidad y abrir conversaciones sobre el impacto cultural de los recursos naturales.
